¿Qué tipos de protectores solares existen?

Actualmente contamos con un repertorio muy amplio de tipos de protectores solares entre los que elegir, con composiciones de ingredientes naturales muy beneficiosos para nuestro cuerpo, y en formatos cada vez más cómodos para utilizar en diferentes circunstancias y partes del cuerpo. A día de hoy, es prácticamente imposible que no encuentres tu protector solar ideal, uno que encaje a la perfección con tus necesidades. Sin embargo, hemos de tener tantos factores en cuenta para poder elegir protector, que a veces es complicado tomar una decisión. En Muum nos hemos puesto manos a la obra, y vamos a ayudarte para que lo más difícil este verano sea elegir bikini, y no un protector decente. ¡Toma nota!

¿Qué tipos de protectores solares existen? 

La protección solar es algo que debemos tener presente en nuestra vida tanto en invierno como en verano. A día de hoy, es indispensable tener un buen protector solar en casa, ya que el sol emite rayos nocivos a lo largo del año. Según nuestro objetivo, deberemos optar por diferentes formatos y aprender a diferenciar los distintos productos de protección que tenemos disponibles en el mercado. 

Bronceadores solares

Los bronceadores son productos que nos ayudan a intensificar el bronceado, ayudando a que la piel se mantenga húmeda. Este tipo de solares suelen tener un SPF relativamente bajo, que permite una mayor incidencia de los rayos solares en nuestra piel, ya que la prioridad es obtener un bronceado bonito. Al elegir nuestro bronceador, hemos de tener en cuenta nuestro fototipo, ya que si tenemos una piel sensible y clara, corremos riesgo de quemarnos si no sumamos una protección extra. 

Protectores solares

Los protectores solares admiten el bronceado al mismo tiempo que evitan las quemaduras solares. Aquellos que son de amplio espectro nos protegen tanto de los rayos UVA como de los rayos UVB, y los hay de distintos FPS para poder proteger a todo tipo de pieles. Para elegir un protector adecuado, hemos de tener en cuenta el tipo de piel que tenemos (grasa, mixta, seca…), y su nivel de fotosensibilidad (clara, morena, negra…).

Bloqueadores solares 

Los bloqueadores solares absorben por completo la radiación ultravioleta, ofreciendo una protección máxima y reduciendo el bronceado al mínimo. Al impedir que las radiaciones alcancen nuestra piel y hacer que se reflejen los rayos UVA y UVB es ideal para las personas con la piel muy sensible, clara o fina. 

Tipos de filtros solares

Según su modo de actuación, los filtros solares se clasifican en físicos, químicos y biológicos. 


Filtro solar químico 

Los filtros solares químicos actúan absorbiendo la radiación solar ultravioleta, y convirtiéndola en radiación térmica, inocua para nuestra piel. Según la longitud de onda absorbida, podemos distinguir entre filtros UVB, uva y de amplio espectro. Al tener una textura fluida, son fáciles de aplicar, y deben extenderse por la piel media hora antes de exponerse a la luz solar. 

Filtro solar físico 

Se trata de un filtro que refleja la radiación solar, de alto espectro, que retiene tanto las radiaciones ultravioleta, como las del espectro visible y las del infrarrojo. En ocasiones se les denomina «pantalla» y se usan para evitar el bronceado y el eritema. Sobre todo, están recomendados para los niños más pequeños, para las personas alérgicas a los protectores químicos, para los pacientes de dermatitis y para pieles con cicatrices y afecciones cutáneas. 

Filtro solar biológico 

No son filtros solares como tal, sino agentes antioxidantes que reparan y frenan los procesos oxidativos producidos por la radiación UVA. Además, potencian el sistema inmunológico. Los más comunes son la vitamina A, la vitamina C y la vitamina E, por lo que lo esencial en este caso es cuidar nuestra alimentación. 

Factor de protección solar 

El factor de protección solar aparece indicado en el protector de manera explícita, junto a las siglas SPF o FPS. Esta cifra nos indica la cantidad de tiempo que tardan nuestros tejidos cutáneos en enrojecerse sin utilizar protección, y multiplica en veces el tiempo de protección en relación con ese tiempo inicial. Es decir, un protector SPF 50 significa que nuestra piel tarda en enrojecerse 50 veces más si lo aplicamos, que si no lo hiciéramos. 

Principalmente, encontramos protectores solares con los siguientes factores de protección solar:

  • SPF 15, para personas morenas o muy bronceadas a las que les cuesta quemarse. 
  • SPF 20-30, para personas morenas o bronceadas que requieren una protección media. 
  • SPF 50, para pieles muy blancas y delicadas, que tienden a enrojecerse y no a broncearse. 
  • SPF 50+, ideal para niños y para personas con pieles muy sensibles y muy blancas. 

Formatos de protección solar 

Sí, a día de hoy existen más formatos de protectores solares más allá de la crema de siempre. Muchos de ellos llevan años presentes en el mercado, y todos ellos cumplen con la misma finalidad de proteger nuestra piel de los rayos UVA y UVB. Su diferencia está, básicamente, en su aplicación, además de en las zonas del cuerpo en la que es más óptimo aplicarlos y de su contexto. 

  • En crema, emulsión o loción, el formato por excelencia, que puede ser más o menos fluida e incluso incluir pigmento para añadir un extra de color. Es un fotoprotector efectivo y además ofrece un toque extra de hidratación para pieles sensibles, secas y dañadas. 
  • En aceite, para dar un toque brillante a la piel. Algunas formulaciones están hechas para no engrasar el rostro y ayudan a potenciar el bronceado. 
  • En gel, un formato muy ligero y fresco que se extiende y se absorbe fácilmente y no aporta grasa a la piel. 
  • En spray y bruma, para una aplicación rápida, menos densa y untuosa. Su trampa es que una parte de la dosis se acaba perdiendo en el aire, por lo que debemos aplicarlo a conciencia, fijándonos en que estamos cubriendo la piel centímetro a centímetro. 
  • En polvo, ideales para aplicar en la cara junto con el maquillaje, el favorito de los que no pasan tiempo en casa y de los que no quieren que los brillos arruinen su rostro durante el día. Los encontramos tanto incoloros como con pigmentos que unifican el tono. 
  • En barra, principalmente de uso facial y para llevarlo en el bolso y aplicarlo durante el día, estemos donde estemos. Gracias a su formato tan cómodo, su aplicación puede darse en zonas más pequeñas del rostro, sin tener que mancharse las manos. 

Cómo aplicar correctamente un protector solar

Tan importante es seleccionar un protector solar adecuado, como aplicarlo siguiendo las recomendaciones de los expertos en cuidado de la piel. ¡Sigue los siguientes consejos! 

  • Póntelo al menos media hora antes de exponerte al sol, ya que es el tiempo que tardan los filtros químicos en actuar. Lo mejor es aplicarlo en casa, antes de salir hacia la playa o la piscina. 
  • Cubre todo el cuerpo de manera generosa, teniendo cuidado de haber protegido aquellas zonas más sensibles
  • Extiéndelo uniformemente para que no queden parches.
  • Repite la aplicación con frecuencia, aproximadamente cada dos horas, y cada vez que notes que has sudado, y/o tras cada baño. 

Protégete del sol este verano con muum

Ahora que ya sabes qué tipos de protectores solares hay en el mercado actualmente, y la importancia de utilizarlos correctamente, te recomendamos que optes por productos de calidad, elaborados de manera respetuosa y con ingredientes naturales, como la zanahoria, el coco o el urucum. En muum cosmetics, contamos con una serie de protectores solares que protegerán tu piel y te ayudarán a tener un bronceado de escándalo este verano. 

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